Cubrirse la cabeza : Pañuelos

Pañuelos –cómo los gorros y los sombreros- son esa clase de  complementos peligrosos y difíciles de llevar que para atreverse hay que hacerlo con estilo, ya sea a lo hippie, retro/vintage, oriental…

Con el estilo que sea pero con cuidado (hasta para lucir un look descuidado) porque el pañuelo lejos de añadirnos estilo y seguridad nos los puede arrebatar. 

Pocas personas son las que pueden permitirse ponerse una servilleta  a cuadros en la cabeza y parecer que llevan un pañuelo y muchas las que se ponen un pañuelo y parece que llevan una servilleta.

Un pañuelo en la cabeza (excepto en los casos en que hay que llevarlos por obligación, con los que no voy a frivolizar) puede resultar un complemento divertido o jocoso dependiendo de cómo se lleve. 

Para mí sin ir más lejos, mis dos formas favoritas de usar pañuelo serían el puro años 50 tan favorecedor y que entre otras guapas de la época inmortalizó Audrey Hepburn, que es para mí uno de los iconos de la elegancia.

Y la otra manera de colocarse un pañuelo en la cabeza de mis favoritas es  anudarlo al rededor del pelo recogido en un moño o una cola de caballo, con flequillo o sin él, tipo felpa con varias vueltas y nudo o enlace arriba que con tanto desparpajo se coloca Eva Mendes y que puestos en mí me da toda la pinta de que voy a encalar una pared.

Pero me encantan, me gusta verlos y a veces me los coloco y recoloco en el espejo  de mi casa intentando convencerme de que yes "I can do it!"…pero luego fuera de las luces de mi baño soy incapaz de lucir. Aunque este verano lo volveré a intentar en la playa.

Porque me encantan,  puestos con estilo me parecen de lo más favorecedor.

Por eso he hecho esta entrada para las que os atreváis y para las que podáis.

He dejado un renglón aparte para los turbantes que tan de moda puso Sheika Mozah y ha recobrado Adriana Ugarte y otras muchas caras famosas a quienes CASI todo les queda bien, con algunas horrorosas excepciones que he preferido evitar. Creo, eso sí que es una prenda que queda mejor con el pelo recogido. ¿Qué opináis?

Próximamente:

Pies para qué os quiero.